GESTION: 2023

I.- ANTECEDENTES

En el mundo la mayoría de las naciones velando por su seguridad, integridad y soberanía, cuentan con Fuerzas Armadas que desempeñan un rol fundamental para su sobrevivencia como Estado soberano e independiente, con la capacidad de poder enfrentar amenazas tradicionales y emergentes, en escenarios cada vez más complejos y diversos; por lo tanto, es de vital importancia la formación integral y una mayor profesionalización de sus componentes, siendo el pilar fundamental para lograr este objetivo los Institutos de formación profesional.

En Latinoamérica las Fuerzas Armadas se formaron en el seno de las sociedades que cansadas del yugo español se constituyeron en el brazo armado en las guerras emancipadoras buscando la libertad e independencia de las naciones emergentes.

Bolivia después de 16 años de una cruenta guerra logra por fin su independencia, siendo su primer presidente el Libertador Simón Bolívar, quien, ante la necesidad de contar con personal altamente capacitado en la planificación y conducción de operaciones militares, inmediatamente ordena la conformación de una Escuela Militar para la formación de Oficiales denominada Compañía de Alumnos Militares.

II.- INTRODUCCIÓN

Con el nacimiento de la República de Bolivia, surge la imperiosa necesidad de contar con una institución capaz de garantizar su libertad y soberanía, un Instituto para la formación y capacitación de Oficiales con la capacidad de organizar e implementar una fuerza propia para la nación emergente, la cual responda a su realidad y necesidades.

A través del tiempo el Colegio Militar del Ejército sufre una serie de transformaciones, cambiando de residencia en varias oportunidades, con cierres y reaperturas de acuerdo a la situación social del momento; sin embargo, no cambia su esencia y su misión fundamental, enmarcada en la actualidad en la Constitución Política del Estado.

El Artículo 208º de la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia refiere: “Las Fuerzas Armadas tienen por misión fundamental defender y conservar la independencia, seguridad y estabilidad del Estado, su honor y la soberanía del País; asegurar el imperio de la Constitución, garantizar la estabilidad del Gobierno legalmente constituido, y participar en el desarrollo integral del país”.

III.- DESARROLLO

El Colegio Militar del Ejército nace con la Patria misma, mediante Decreto Supremo del 13 de diciembre de 1825, promulgada por el Libertador Simón Bolívar, el cual establece su funcionamiento en la ciudad de Chuquisaca con el denominativo de “Compañía de Alumnos Militares”, al no contar todavía con instalaciones propias, inicia sus actividades en 1826 provisionalmente en predios del Colegio de San Juan, bajo la dirección del entonces Tcnl. Sebastián Agreda con 16 postulantes que dieron vida al primer instituto de formación militar para Oficiales, por diversos sucesos que convulsionaron el País es clausurada por varios años.

Durante la presidencia del entonces Gral. Andrés de Santa Cruz y Calahumana, se ordenó la reapertura de la “Compañía de Alumnos Militares”, esta vez con el denominativo de “Colegio Militar”, mediante Decreto del 19 de febrero de 1835, mismo que inicio sus actividades con 60 alumnos denominados “Clase de Cadetes”, funciono durante 4 años, hasta que el ya Mariscal Santa Cruz, ordenara su clausura mientras se desarrollara la campaña de la Confederación.

Durante el Gobierno del vencedor de Ingavi, Mariscal José Ballivian, se ordena su reapertura en la ciudad de La Paz, mediante la promulgación del Decreto Supremo del 22 de abril de 1842, bajo la dirección del Militar argentino Bartolomé Mitre, posteriormente se dispone su traslado a la hacienda de Mecapaca a órdenes del Tcnl. José María Acha, funcionando hasta 1847, posteriormente es clausurado.

Durante la presidencia del Dr. José María Linares entre los años de 1857 a 1861 se organizó una “Academia Militar” en la Localidad de Sapahaqui a 74 Km. de la ciudad de La Paz, su permanencia fue efímera.

Por Decreto del 18 de diciembre de 1872, durante el gobierno del Dr. Tomas Frías Ametller se realiza la reapertura del Colegio Militar por un corto periodo, bajo la dirección del Gral. Div. del Ejército francés M. Raulus Brisson héroe de la guerra Franco-Prusiana.

El año de 1888, con los auspicios del entonces Ministro de Guerra Don Severo Fernández Alonso, mediante Resolución del 27 de noviembre de 1888 y por Decreto Supremo del 17 de abril de 1891 promulgada por el entonces Presidente Dr. Aniceto Arce Ruiz, se realiza la reapertura del Colegio Militar en la ciudad de La Paz en el Local existente en la calle Sucre denominado en esa época “Cuartel Chico”, bajo la dirección del Gral. Pedro Villamil con un efectivo de 27 Cadetes. Producto de movimientos de carácter regional y político el 25 de julio del mismo año es trasladado a la Capital del Estado Sucre y posteriormente a la Localidad de Yotala.

El año de 1898 sobrevino la Revolución Federal, que trajo como consecuencias la reducción del efectivo del personal de Cadetes mediante una Orden General y su traslado a la ciudad de Oruro, orden que fue ejecutada el mes de julio de 1899, permaneciendo en esta ciudad hasta enero de 1900, para ser nuevamente trasladada a la ciudad de La Paz.

El 30 de septiembre de 1899, el entonces presidente Gral. José Manuel Pando ordeno la compra de un amplio local a la Señora Matilde Ascarrunz de Lastra en la mejor zona de La Paz para ese entonces, en el cual se construyó extensos salones para dormitorios, comedores, gabinetes de juego, picaderos, gimnasios, caballerizas, entre otros, donde el Colegio Militar realiza su reapertura, abriendo sus puertas el 30 de octubre de 1900 a los jóvenes bolivianos que deseen abrazar la carrera de las armas, iniciando sus actividades con un efectivo de 60 Cadetes, distribuidos en tres secciones correspondientes a las tres armas, Infantería, Caballería y Artillería. En 1906 el Colegio Militar se reorganiza, suprimiendo la organización por secciones, quedando conformada como Compañía de Infantería con 70 alumnos. En 1910 se formula un nuevo Plan de Estudios, incrementando los cursos de Derecho Internacional aplicado a la guerra, Historia Militar de Bolivia, Higiene Militar, Telegrafía, idioma alemán y esgrima. En 1911 es designado como Director el Mayor Friedich Muther, miembro de la misión militar alemana, quien modernizo la instrucción y la capacitación militar, moral e intelectual de los Cadetes.

En julio de 1932 estalló la guerra del Chaco, poniendo a prueba la capacidad militar de Bolivia para enfrentar el conflicto, al inicio del conflicto se ordenó el egreso adelantado de los Cadetes de 5to. Año y en noviembre del mismo año egresan los Cadetes de 4to. Año, quedando para 1933 solamente tres cursos, los cuales el 6 de octubre de 1933 al ser requeridos como voluntarios para concurrir a la guerra, con la finalidad de cubrir las falencias en personal para los mandos intermedios, respondieron al unísono y en un solo movimiento, dando los históricos “tres pasos al frente”, dando una muestra de valentía, patriotismo y amor a la Patria que no tiene parámetro de comparación con ningún Instituto Militar en el mundo, algo realmente admirable y que debe ser digno de recordar y emular por las generaciones presentes y futuras.

Durante el gobierno del Cnl. David Toro Ruiloba, el 18 de abril de 1937 se realiza la reapertura del Colegio Militar bajo la dirección del Gral. Pastor Baldiviezo, con un efectivo de 115 Cadetes, de los cuales 40 ya ostentaban el grado de Oficial de Reserva, mismo que se les había otorgado por méritos de guerra, conformando con ellos el 5to. Año Militar.

El año de 1939, durante la presidencia del Tcnl. German Busch Becerra, ante la necesidad de mejorar el rendimiento y buscar una mayor eficiencia en el desarrollo de la Instrucción de los Cadetes, es que se ve por conveniente la adquisición de terrenos denominados Fundo de IRPAVI, lugar donde se edificaron las instalaciones del nuevo Colegio Militar, dándose inicio a las mismas el 26 de mayo de 1939 a horas 11:00 con la colocación de la piedra fundamental por parte del Presidente.

Durante la presidencia del Gral. Enrique Peñaranda Castillo el 18 de abril de 1941 se inauguran las nuevas instalaciones del Colegio Militar, bajo la dirección del General Felipe Rivera, el 25 de mayo del mismo año se hace la entrega oficial y el 26 de octubre se realiza el traslado del Batallón de Cadetes.

Por los sucesos acaecidos en la denominada Revolución del año de 1952 y la decisión del nuevo Presidente del Estado Dr. Víctor Paz Estenssoro, el Colegio Militar es clausurado y los Cadetes son licenciados y dados de baja por Orden del Día de las Fuerzas Armadas Nº 12/53 del 2 de julio de 1953.

El 14 de julio de 1953, por Decreto Supremo Nº 03458, el primer Instituto de formación militar adquiere el denominativo de Colegio Militar “Cnl. Gualberto Villarroel”.

El 24 de julio de 1953, el gobierno autorizó la reapertura del Colegio Militar, el 29 de julio se dispone el cambio de su denominativo de Colegio Militar “Gral. Pedro Villamil” a Colegio Militar “Cnl. Gualberto Villarroel” por Orden del Día de las Fuerzas Armadas Nº 13-“A”-53, en cumplimiento al Decreto Supremo Nº 03458, el 12 de octubre se materializa la misma, bajo la dirección del Cnl. Gualberto Olmos Arrazola, en esta etapa se organizó de la siguiente manera: tres cursos preparatorios, tres cursos de humanidades y dos cursos de formación militar, representaba en realidad una mezcla entre liceo militar y un instituto de formación castrense.

El 19 de diciembre de 1964, durante la presidencia del Gral. Rene Barrientos Ortuño, se dispone la reincorporación de todos los ex cadetes que fueron dados de baja en 1952, con el grado de Subteniente.

Durante la Presidencia del Gral. David Padilla Arancibia a finales de 1978, el Colegio Militar abrió sus puertas a las primeras Damas Cadetes, egresando tres promociones en los años de 1982, 1984 y 1985, las cuales se las denominó la “Primera Generación”.

El año de 1983, durante la segunda presidencia del Dr. Hernán Siles Suazo, se toma la decisión de prohibir definitivamente el ingreso de mujeres a cualquier instituto de formación militar en Bolivia.

Durante la presidencia del Lic. Gonzalo Sánchez de Lozada a finales del 2002 se autoriza al Colegio Militar el ingreso de Damas Cadetes, ingresando las primeras Damas de la “Segunda generación” el año 2003, egresando como Subtenientes el año 2007, actualmente ostentan el grado de Mayor y se encuentran cursando el primer ciclo de la Escuela de Comando y Estado Mayor.

IV.- CONCLUSIONES

El Colegio Militar del Ejército “Cnl. Gualberto Villarroel”, a través de la historia se ha constituido en la matriz de acero que forma Oficiales licenciados en Ciencia y Arte Militar Terrestre, con profundos valores ético, morales y una férrea disciplina, altamente capacitados como líderes planificadores, administradores, instructores y conductores de operaciones en el nivel que les corresponde.

El Colegio Militar se basa en un modelo educativo militar e integral por competencias, que permite una adecuada selección, formación, capacitación, perfeccionamiento y especialización de sus componentes, constituyéndose en el primer instituto de formación profesional de oficiales con la capacidad de realizar una correcta lectura de la realidad nacional y mundial, con un profundo amor por la Patria y la Institución.